domingo, octubre 21, 2007

Supercool ¿O no?

Como este fin de semana andaba generoso y con ganas de cumplir mi rol de buen hermano mayor, se me ocurrió invitar a mis brother & sister al cine. La primera cuestión que tenía que resolver era qué película les proponía ir a ver; obviamente tenía que ser una que a mí me gustara (nunca tan desinteresado).
Porque lo dejo en claro: yo “propongo” las alternativas y descarto el resto. No estoy pa' terminar viendo cualquier bodrio por dejar la elección al (des)criterio de un par de adolescentes (es parte de mis rasgos autoritarios).

Con mi hermano (17 años) no había mayor drama, porque es como perrito nuevo, mueve la cola con cualquier película; él disfruta de ir al cine. Mi hermana en cambio (explosivos 18 años), bueno, ahí la cosa se complica un poco… en realidad harto. Yo cacho que ya le da un poco de vergüenza salir con nosotros.
Pero, yo me pregunto, ¿qué puede tener de malo para una lola acompañar a sus hermanos a ver la última de Harry Potter o Shrek?

En fin, revisando con acuciosidad casi sociológica la cartelera, opté por proponerles Supercool; película de adolescentes gringos, pero con muy buenas críticas.

Resultado: mi hermano dijo que sí altiro, mi hermana que no, porque tenía mucho que hacer. Mi idea era que saliéramos los tres, así que sugerí otro panorama, pero mi hermana puso cara de lata igual, y mi hermano, que ya se había ilusionado con la idea del cine –como perrito nuevo que ve la correa de paseo- ya estaba listo para soltar su veguino repertorio de improperios hacia la -en sus palabras- arruinapanoramas.
En vista de la situación, terminamos yendo sólo el par de brothers al teatro.
Todo bien hasta ahí.
El problema surgió cuando empezó la película y me doy cuenta que el 90% de los diálogos gira en torno a la iniciación sexual, y especialmente a la práctica tan bien difundida por nuestra criolla Naty.
Ahí como que se me formó el nudo en la guata, porque hasta esa fecha todas las películas que había llevado a ver a mis hermanos eran bien inocentonas; onda de esas que son recomendadas por la calificación cinematográfica católica (para la cual hasta La Novicia Rebelde sería “aprobada, pero con reparos”).
Tengo claro que a estas alturas mi hermano debe saber más de sexo que yo, y probablemente también ha visto más pornografía en internet (pese a lo que algunos puedan creer, nunca me ha llamado mucho la atención ese tema; encuentro más erótico lo sugerente que lo obvio), pero igual me complicaba el hecho de estar en cierta medida “validando” esas conductas tan relajadas, y eso que la película no muestra nada subido de tono.
Tienen que entender que siempre he sido un ejemplo de autoridad moral en mi familia (cof, cof), el hermano responsable y serio, de conducta irreprochable… esteee, bueno, ésa es la impresión que tienen. Entonces, igual estaba un poco complicado, en actitud de “chuta, la película que elegí”, por lo que a cada rato miraba de reojo a mi hermano para ver su reacción. Y la verdad, creo que él estaba tan cohibido como yo de estar viendo esa película conmigo (si él tuviera 25 años habríamos estado los dos muertos de la risa).
De hecho, al salir del cine casi ni comentamos la historia. Nuestro diálogo fue el siguiente:
-(Yo) “Estuvo simpática la película”
-(El) “Sí, entretenida”

A lo cual, y tras unos segundos de silencio, opté por agregar:
-(Yo) “Aunque un poquito subida de tono”
-(El) …
-(Yo) …
-(Ambos) …
-(Yo) “Tengo hambre"
-(El) “Yo también”
-(Yo) “¿Vamos a comprar papas fritas?”
-(El) “¡Ya! Pero tú invitas”
Y de la película no se habló más. En fin, supongo que son etapas del crecimiento por las que hay que transitar.

domingo, octubre 14, 2007

Fomentando el deporte

No estoy ni ahí con la Roja de todos, para mí el verdadero interés en estos días está puesto en el Mundial de Rugby que se desarrolla en Francia (y que en el cable transmite ESPN+).
Como ya he dicho en otras ocasiones, este deporte me resulta MUY interesante, así que para contribuir a su difusión, propongo algunos nombres que conformarían mi quince ideal. Creo que las imágenes también explicarán por qué me atrae tanto el rugby.

-Representando a los dueños de casa, el muy mediático y Dieux du Stade Frédéric Michalak



-Por el equipo de la Rosa, defensores del título de campeones, el inglés Jonny Wilkinson



-Nominado uno de los mejores (jugadores) del mundial, el argentino Juan Martín Hernández. ¡Vamos Pumas!



-Los All Blacks eran los grandes favoritos y perdieron, aún así Carl Hayman merece un lugar destacado en mi lista.



Bonus Track
-El apuesto cara-de-niño-bueno Jean-Baptiste Elissalde y Jérôme Thion, en un semiabrazo que no me deja indiferente.


-Y éste no sé quién es, pero igual lo incluiría en mi selección ¿Qué opinan ustedes?